La pequeña Eva está muy triste porque ya han pasado dos días desde que su gata, Luna, desapareció. Han colocado carteles y la han buscado por todas partes, pero no ha habido suerte… De noche, en su habitación, mientras está pensando en su gatita, Eva escucha unos extraños sonidos que proceden de debajo de su cama. ¿Un búho ululando? ¿El aullido de un lobo? Eva no puede creer lo que ve. Bajo su cama hay una puerta de entrada al mágico Zoo de Medianoche, el lugar al que van las mascotas perdidas.
Las llamativas ilustraciones de Karl James Mountford, con colores que parecen iluminados por la luz de una mágica luna, dan vida a esta tierna historia de Maudie Powell-Tuck sobre mascotas que se pierden… ¡y que regresan felizmente a casa!