Wren Grayson odia los pájaros.
Los odia porque la despiertan cada mañana. Los odia porque su padre, ornitólogo, está obsesionado con ellos. Los odia porque se llevaron a su madre. Y porque sueña con ellos y le hablan. Y porque cuando lo hacen, ella los entiende.
Pero solo los pájaros podrán coser las heridas que han roto su familia, y devolverle a su madre, perdida en las marismas de Luisiana, que ocultan un mundo lleno de magia y leyenda.