De la noche a la mañana, Avery Grambs pasó de dormir en su coche a heredar miles de millones. Ya instalada en un mundo de opulencia, acertijos, peligro y secretos familiares, va en busca de la única persona que puede tener las respuestas a todas sus preguntas, incluyendo por qué el excéntrico multimillonario Tobias Hawthorne le dejó toda su fortuna, siendo una completa desconocida, en lugar de a sus propias hijas y nietos.
Avery tiene un test de ADN que confirma que biológicamente no es una Hawthorne, pero se le empiezan a amontonar cantidad de pistas crípticas que sugieren una conexión más profunda con la familia; y se descubre inmersa en otro juego, tan retorcido como el primero. Mientras se esfuerza por resolver un enigma tras otro, pronto queda claro que nada es lo que parece. Grayson y Jameson, dos de los enigmáticos y magnéticos nietos Hawthorne, continúan atrayendo a Avery hacia direcciones opuestas.
Cada vez resulta más difícil saber quiénes son sus aliados y quiénes no se detendrán ante nada para quitarse a Avery de en medio… cueste lo que cueste.